8 dic 2015

TODAS LAS FECHAS QUE SE "PREDIJO" EL FIN DEL MUNDO (POR SECARSOS Y DETECTIVE)


Con la angustia en un puño y en voz alta, nuestros antepasados repitieron decenas de veces que el mundo dejaría de existir, sea por fuerzas sobrenaturales, por dioses, por el hombre o muchas veces por lo que se les ocurriese.

La trascendencia que subrayó la religión (sobre todo la cristiana) repitió otro buen puñado de veces el fin de los tiempos. Pero a diferencia de las anteriores, esta vez se encargaron las autoridades y reconocidas santidades.







Ello nos da una valiosa lección: recuerda que por mucha información que nos brinde estar interconectados, no toda es valiosa: mi consejo es que valides las fuentes de absolutamente todo.

1.Isaac Newton, reputado matemático donde los haya, calculó que en el 2060 llegaría el apocalipsis bíblico.
2.Michel de Nostradamus asegura que ocurrirá en el 3797.
3.Y la vidente que (casualmente) acertó algunos eventos adversos de la humanidad, dijo que los límites del universo se acabarían en el año 5079.




Los cristianos todavía insistían después de las anteriores profecías. Relacionaban cualquier número, fecha, visión o peculiaridad y siguieron augurando la inminente catástrofe mundial hasta tal punto, que los ciudadanos llegaron a creer fervientemente que el mundo amanecería en llamas, creando un caos absoluto en muchas villas y poblados, robos, asesinatos, y terribles fechorías.

En este punto de la humanidad ocurrió algo similar a las cadenas de whatsapp que propagan información poco veraz. Aunque habían casos de cristianos y monjes que insistían que Jesucristo resucitaría para purgar el mundo, los protagonistas fueron los que nunca hablaron, los que menos cabía esperar por su naturaleza científica: los astrónomos del pasado vaticinaron varias veces que un cometa haría diana contra la tierra, y fueron tan locuaces con el mundo, que hasta otras comunidades científicas llegaron a creerlos.

Cada vez era más difícil agarrarse a textos e incongruencias religiosas, pero eso no dio por vencidos a algunos que, saltándose el protocolo apocalíptico habitual (leer, imaginar, inventar y compartir), se valieron de farsas y el ilusionismo para nuevos escenarios muy… muy variopintos, y hasta graciosos, por parte de sectarios y bromistas catastrofistas.

Los astrónomos más paranoicos parecía que competían con los insistentes cristianos, revisaban y calculaban profecías fallidas de modo sistémico pero poco racional.

La siguiente etapa se caracterizó por ser variada: cristianos (como siempre), nuevos sectarios (su segunda actualización), revisadores de viejas profecías (personas que malgastaron su tiempo) y... ¡oh, hasta el primer caso de la rebelión de las máquinas! Muchos de ellos llegaron a los medios de comunicación de toda la esfera.

Algunos aficionados a la astronomía que, cada vez más accesible para algunos que carecían de recursos para interpretarla, marcaron un antes y un después al insultar la reputada y amplia ciencia del cosmos, con falsos argumentos de la hecatombe. Cuando se sanó ese tejido de la ciencia, internet hizo el resto cuando, sin venir a cuento, algún desaprensivo se dedicó a poner mucho énfasis al calendario maya. Oh, ¿Quién no recuerda las largas cadenas en los muros de facebook, con imágenes del mundo en llamas? ¿O niños con Smartphone que, después de pasar media hora navegando, temblaban horrorizados por el fin del mundo? Recuerdo como si fuera ayer, cómo la película “2012” se encargó de sazonar la paranoia colectiva.

Este post no se despedirá sin decirte las últimas profecías importantes, que (por suerte) dentro de muchos, muchos años, nuestro legado tendrá el honor de verlas pasar sin pena ni gloria… Te “profetizo” que la más cercana te dejará perplejo:





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