Los
agigantados saltos de la ciencia evocan una nueva pregunta: ¿Estamos en una
simulación? Esta pregunta no es nueva: el mito de la caverna (click aquí) data del siglo V a.c, y afirma que
los sentidos pueden ser traicionados. Esta publicación va más allá, te explicaré lo que debes saber respecto esa posibilidad.
Existen
videojuegos con descomunales terrenos que, de ejecutarlos íntegramente, ninguna
plataforma informática lo soportaría, y dar un solo paso lo ralentizaría
absolutamente todo; por eso, tan sólo se ejecuta lo que inmediatamente es
necesario para el jugador. En física cuántica (partículas) ocurre el mismo
fenómeno.
Thomas Young demostró
en 1801 que la luz no es una partícula,
que es una onda.
Si la luz fuera una partícula haría esto...
...Pero la luz es una onda, y hace esto otro.
Al
usar partículas subatómicas, observamos a los electrones así.
Sin embargo, al quitar el sensor (receptor), los electrones actúan como una onda.
El anterior
resumen es uno de los mayores retos de la física. Muchos teóricos argumentan
que, en base al anterior experimento, la
realidad se crea cuando es preciso, exactamente igual que en los
videojuegos. Resumiendo: el “juego” se va ejecutando cuando avanzas, y parece ser que nunca está
cargado entero.
Haz click aquí si quieres saber más sobre el
experimento de Young.
Cualquier
físico o matemático se sentirá sumamente comprometido si consigue explicarte
las teorías de campos de gauges. Incluso un habilidoso narrador puede fallar en
el intento… por ello, más que la matemática, usaré imágenes. Presta MUCHA atención:
Una cámara
analógica capta toda la gama de colores, y hace la foto sin perder ninguno. La
naturaleza puede hacer efectos analógicos que incluyan todas las gamas de
colores, por ejemplo el arcoíris.
Sin embargo, una
cámara digital tiene un número concreto de colores, y todo lo que no capte cada
receptor, no aparecerá en la fotografía.
Los físicos y
matemáticos que estudian las teorías de gauge sospechan que el universo, que el tejido espacio temporal, ordena
las partículas de manera digital, y te sorprenderá descubrir que lo digital no puede
ser producto de la naturaleza, sólo puede ser creado a conciencia.
Usamos simulaciones
para saber cuándo lloverá, para calcular la trayectoria de una bala, para saber
dónde orbitarán nuestros satélites, y hasta podemos ver catástrofes naturales
con cierto preaviso. Gracias a las simulaciones sabemos el qué y el dónde con relativa
precisión. De hecho, si tuviéramos un problema tan grave y violento que nos exigiera
más de una simulación, podríamos valernos de diferentes “universos” para
trabajar, y los cálculos dirían cuál es el más acertado o el que mejor prevé ese
problema. ¿La existencia de otros universos (multiversos) pueden ser simulaciones
con diferentes leyes físicas? De ser así jamás lo sabríamos, pues todas las
herramientas para averiguarlo estarían simuladas.
Si quieres información sobre el multiverso haz
click aquí.
Esta es la publicación existente más breve respecto a si vivimos en una simulación o no, si te adentras al mundo del cálculo y los números para saber más, te aviso: no existe nada tan complejo y a la vez tan satisfactorio, que responder las preguntas matemáticas más complejas de la física.
Deseo que este
post te haya gustado leerlo, tanto como a mí me ha gustado hacerlo. Agrégame
a mis redes sociales si quieres ver más contenidos como este. Muchas gracias.
David
Moreno Ruiz.
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